Capítulo 5

Y después de todo lo dicho parece que no queda nada más que decir.
Tengo la sensación, de que cuando estoy contigo sobran las palabras.
Hablamos nuestro propio idioma dentro de nuestro universo formado a base de días de verano y sonrisas.
Me doy cuenta de todo lo que tengo, y es lo que siempre quise.
Estar a tu lado.
Abrazarte como si no existiera un mañana.
Eres el protagonista de todos mis sueños.
Conseguí lo imposible, mi corazón y mi razón, están de acuerdo.
Se sigue resumiendo en un te quiero
Una maldición rota al sonar las doce.
Hace treinta días que te siento.
Besos no estudiados ni planeados.
Treinta días, treinta noches.
Vivo en un todo completo.
Treinta sonrisas, treinta caricias, treinta días teniéndote cerca.
Eres el punto y final de mi mala suerte.
Quiero acostarme ebria de tu olor y despertarme con resaca de amor.
Zaida y Nacho
Un cuento sin Final.
Capítulo 5